El disfrute de balancearse es lo que nos trae éste caballito con suave pelaje. Los estribos y un borde acolchado en la silla dan seguridad al jinete. Al apretar las orejas se oyen relinchos o ruido de galope, el pequeño jinete sentirá su corazón latir de emoción. Infaltable en todo "establo".